Mitos y verdades de la mezcla con audífonos.
Cualquier monitor de estudio de grabación es una herramienta que se usa para “medir” auditivamente los cambios en una trayectoria de audio. Es por eso que los profesionales de la grabación consideran que los factores que constituyen un gran monitor serán la exactitud, la transparencia y la respuesta plana.
Gracias a la visión de marcas como KRK, que han tomado siempre en cuenta las opiniones de ingenieros y productores, la marca ha desarrollado monitores que se han convertido en herramientas de grabación de gran importancia. Pero ésta no es la única forma de lograr una mezcla sonora de alta calidad, ya que así como han cambiado los entornos de producción con los contenidos creados actualmente, como podcasts, videos para redes sociales e ingenieros de audio y músicos en gira, se requieren otro tipo de equipos para lograr un sonido extraordinario, además de derribar algunos mitos acerca de la mezcla sonora.
¿Qué ofrecen ambos equipos?.
Es una realidad que tanto los audífonos como los monitores tienen características que los hacen propios para distintas necesidades, y ahí es donde los mitos empiezan a caer: “Empecemos por lo más obvio: los audífonos son mucho más portátiles y accesibles, y aunque esta parte del presupuesto a veces puede parecer un punto secundario, si desde un inicio no tenemos los recursos suficientes para comprar un par de monitores de buena calidad -como los Rokit, de KRK-, es mejor que se adquieran audífonos de buena calidad, lo que nos permitirá tener un buen producto a un precio mucho más accesible”, comenta Isaac Llanos, Desarrollador de Mercado de Representaciones de Audio, compañía distribuidora de KRK en México.
Prácticamente podemos utilizar los audífonos en cualquier entorno, ya sea en un avión o un autobús, en una sala de espera en tiempos muertos o en cuartos de hotel para los músicos, productores o creadores de contenido que tienen que editar sobre la marcha. “Esto también va de la mano con que son completamente independientes del entorno o el lugar donde los utilicemos y éste otro punto a favor, sobre todo para usuarios que están comenzando y que actualmente trabajan en home studios o incluso en lugares más pequeños, en habitaciones que no tienen ni las medidas ni las características acústicas para trabajar con monitores de forma cómoda y correcta. En estos casos, los audífonos son una gran solución”.
Del otro lado, los puntos débiles de los audífonos frente a los monitores tiene que ver mucho con la forma en la que percibimos la imagen estéreo: “A pesar de que los audífonos pueden hacer esta separación LR, si nosotros escuchamos un sonido únicamente del lado derecho, el izquierdo prácticamente no lo hará, lo que en la vida real no sucede así, ya que si nosotros escuchamos un sonido de un lado, el otro oído también lo percibirá en cierta medida y así tendremos una imagen más realista. Otro punto importante con el uso de audífonos es que al estar tan cerca de nuestro sistema auditivo, pueden llegar a ser muy cansados, sobre todo si los utilizamos con un volumen muy elevado, además de que también podemos tener un problema a largo plazo”.
Al contrario, con los monitores tendremos esa adecuada imagen estéreo, lo que nos dará un panorama mucho más realista, no sólo en lo que se refiere a la espacialidad, sino en el caso de las frecuencias más graves, que en muchos casos no basta con escucharlas y hace falta percibirlas a través de las vibraciones que solamente se sienten cuando estamos utilizando una bocina que pueda generarlas.
“Otro punto es que precisamente los monitores, al estar a una distancia más grande, alrededor de un metro o metro y medio de distancia de nuestros oídos, nos generará una menor cantidad de fatiga auditiva, aunque si los utilizamos a un volumen muy fuerte y durante muchas horas y muy cerca de nuestros oídos, también nos causará problemas. En cuanto a las desventajas, de entrada el principal es el presupuesto, ya que siempre hay que adquirirlos por par, además de que siempre debemos tener el espacio y los accesorios adecuados, como bases, cableado y alguna interfaz para poderlos utilizar, además de que dependen completamente de la acústica del lugar, haciéndolos imposibles de usar en espacios pequeños o que no tengan tratamiento acústico”.
Esto es, brevemente, lo que podemos esperar en el uso de audífonos y monitores para la edición y mezcla sonora. En el caso de los primeros, el desempeño se puede optimizar. “Si el primer inconveniente es la fatiga auditiva, se recomienda usarlos a un volumen moderado, tomando descansos durante la grabación o la mezcla”, menciona Isaac.
“También es muy importante conocer al máximo los audífonos, porque así podemos tener muchas referencias sonoras, escuchando música cotidianamente con los mismos audífonos que utilizamos para mezclar y conocer cómo debe sonar. Esto es algo muy importante, porque así podemos dedicar mayor tiempo a conocer nuestra herramienta de trabajo. Además,
existen en el mercado muchos softwares o plug ins de emulación acústica que nos permiten recrear espacios acústicos y la imagen estéreo, como si estuviéramos trabajando con monitores, a través de nuestros audífonos. Así se facilita mucho el trabajo, de tal forma que con unos audífonos puedo lograr un resultado profesional”.
Por otro lado, es importante saber hacia dónde va nuestro producto sonoro. “Hay mucho contenido audiovisual que será escuchado en equipos de cine en casa, computadoras, la bocina del teléfono celular, o en el mejor de los casos en unos audífonos, en formatos para internet que son producidos el 99 por ciento de las veces en dispositivos móviles con o sin audífonos, de forma que es esencial pensar en el tipo de usuario que consumirá este contenido. Si el usuario lo consumirá de cierta forma, sería muy importante poder mezclar desde un principio pensando en esta lógica de trabajo”.
Las opciones de KRK.
Dentro de la familia de audífonos KNS de KRK está la gama 6000, con el nuevo modelo KNS6402, que presenta algunas diferencias en cuanto a la construcción: se mejora el desempeño con dispositivos móviles, dirigiéndose en gran medida a los creadores de contenido que graban y deben editarlos para publicarlos rápidamente y no tienen acceso a un espacio de edición más allá de su computadora y un par de audífonos, además de ingenieros de audio en vivo, que pueden usarlos sin problema en pruebas de sonido, gracias a que son cerrados, circumaurales (cubren toda la oreja), y se pueden usar exitosamente en entornos con ruido, además de contar con un cable desmontable de 2.5 metros.
Para largos periodos de trabajo, las almohadillas del KNS6402 están hechas de una espuma acústica muy suave. Su respuesta de frecuencia es de 10 Hz a 22 kHz y su construcción liviana en polímero ABS y su diseño compacto ofrece gran portabilidad, además de contar con articulaciones para poderlos girar, así como una bolsa de transporte.
Es una verdad que actualmente, del contenido profesional que se realiza, una buena cantidad se hace con audífonos, de manera que es altamente recomendable contar con unos de buena calidad como referencia adicional, pero también como herramienta principal de trabajo. Así podremos ir derribando los mitos de la edición y mezcla con estos dispositivos: cuando tenemos un presupuesto pequeño o moderado será mucho mejor dedicarlo a unos buenos audífonos, aprovechar todas sus ventajas y obtener el sonido que buscamos.